Aprendiendo de Saulo en Damasco

Basándose en la historia de Saulo, que la encontramos en Hechos 9:10-18, analizaremos las ventajas de tener amistades con locales y de escuchar la voz de Dios en todo momento cuando vamos al campo.

 10 había entonces en Damasco un discípulo llamado Ananías, a quien el Señor dijo en visión: Ananías. Y él respondió: Heme aquí, Señor. 11 Y el Señor le dijo: Levántate, y ve a la calle que se llama Derecha, y busca en casa de Judas a uno llamado Saulo, de Tarso; porque he aquí, él ora, 12 y ha visto en visión a un varón llamado Ananías, que entra y le pone las manos encima para que recobre la vista. 13 Entonces Ananías respondió: Señor, he oído de muchos acerca de este hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén; 14 y aun aquí tiene autoridad de los principales sacerdotes para prender a todos los que invocan tu nombre. 15 El Señor le dijo: Ve, porque instrumento escogido me es este, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel; 16 porque yo le mostraré cuánto le es necesario padecer por mi nombre. 17 Fue entonces Ananías y entró en la casa, y poniendo sobre él las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo. 18 Y al momento le cayeron de los ojos como escamas, y recibió al instante la vista; y levantándose, fue bautizado.

Podemos analizar como Ananías, estaba preparado para lo que Dios le había pedido hacer, conocía sobre Saulo, había escuchado lo que él había hecho, sabía de sus movimientos, el poder que tenían y de que él se encontraba en su ciudad. Lo interesante es que a pesar de haber sabido todo, de saber los riesgos, Dios le pide que vaya a verlo, él le consulta a Dios y Dios le dice que vaya. Esta obediencia de Ananías se la puede ver como fruto, al después ver la conversión de Saulo y todo lo que Dios lo usa.

¿Qué nos enseña esto con respecto a la ciberseguridad? Que debemos conocer nuestro entorno, debemos escuchar a los locales, debemos investigar, pero por sobre todo debemos consultarle a Dios todo lo que hagamos. Un mártir es el que muere por causa de Dios, si comete un error por imprudencia o por no consultar a Dios, es de mal ejemplo para los otros obreros.

Obedecer a Dios fue algo imprescindible para Ananías, ahora nos introduciremos más en la vida de Saulo, leyendo la escritura en Hechos 9:19-25

19 Y habiendo tomado alimento, recobró fuerzas. Y estuvo Saulo por algunos días con los discípulos que estaban en Damasco.

20 En seguida predicaba a Cristo en las sinagogas, diciendo que este era el Hijo de Dios. 21 Y todos los que le oían estaban atónitos, y decían: ¿No es este el que asolaba en Jerusalén a los que invocaban este nombre, y a eso vino acá, para llevarlos presos ante los principales sacerdotes? 22 Pero Saulo mucho más se esforzaba, y confundía a los judíos que moraban en Damasco, demostrando que Jesús era el Cristo. 23 Pasados muchos días, los judíos resolvieron en consejo matarle; 24 pero sus asechanzas llegaron a conocimiento de Saulo. Y ellos guardaban las puertas de día y de noche para matarle. 25 Entonces los discípulos, tomándole de noche, le bajaron por el muro, descolgándole en una canasta.

Como leíamos, Saulo era alguien que no tenía miedo de predicar el evangelio a otros, incluso en lugares en donde no creían nada de Jesús. Con el tiempo se va ganando enemigos, que casi lo mataron, pero gracias a los creyentes y amigos locales que tenía, pudo salvar su vida. Es importante que si decides ir al campo misionero, puedas tener amistades locales que te ayuden a entender la cultura y cuando algo no anda bien, además debes tener un plan de contingencia para poder escapar si ocurre algo malo. El que Saulo tuviera un plan de evacuación salvó su vida, por eso es muy importante contar con uno, no solo para eso sino para diferentes circunstancias. También debemos ser cuidadosos, ya que si cometemos errores de seguridad podemos poner en riesgo la vida de otras personas

Saulo nos deja muchas enseñanzas sobre la seguridad, leamos el siguiente pasaje en Hechos 9: 26-31 y veamos qué más podemos aprender de él.

26 Cuando llegó a Jerusalén, trataba de juntarse con los discípulos; pero todos le tenían miedo, no creyendo que fuese discípulo. 27 Entonces Bernabé, tomándole, lo trajo a los apóstoles, y les contó cómo Saulo había visto en el camino al Señor, el cual le había hablado, y cómo en Damasco había hablado valerosamente en el nombre de Jesús. 28 Y estaba con ellos en Jerusalén; y entraba y salía, 29 y hablaba denodadamente en el nombre del Señor, y disputaba con los griegos; pero estos procuraban matarle. 30 Cuando supieron esto, los hermanos, le llevaron hasta Cesárea, y le enviaron a Tarso.

31 Entonces las iglesias tenían paz por toda Judea, Galilea y Samaria; y eran edificadas, andando en el temor del Señor, y se acrecentaban fortalecidas por el Espíritu Santo.

Para Saulo, no fue sencillo en el comienzo poder reunirse con los otros discípulos, ya que él generaba disturbios y problemas con los judíos. Sin embargo, Dios tocó el corazón de Bernabé, sin dudas fue un riesgo, pero una vez que llegó a conocerlo, lo llevó a conocer al resto de los discípulos. Una vez más, Saulo tuvo amenazas de muerte, por lo que decidieron que lo mejor sería irse a otro lugar. Como podemos leer en los lugares en donde Saulo no estaba, las iglesias tenían paz y crecían, esto se debía a que ellos compartían de las buenas nuevas con prudencia y seguridad.

Next
Next

Por qué Algunas Iglesias Tienen Miedo de Enviar Misioneros y lo que Deberían Saber